Investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos han puesto en marcha el programa 'Evaluación e Intervención en la Regulación Emocional' que persigue enseñar al personal sanitario a manejar sus emociones en su interacción con el paciente y facilitar su recuperación tras periodos de exposición a situaciones de gran estrés emocional.
MÓSTOLES, 7 (EUROPA PRESS)
Investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos han puesto en marcha el programa 'Evaluación e Intervención en la Regulación Emocional' que persigue enseñar al personal sanitario a manejar sus emociones en su interacción con el paciente y facilitar su recuperación tras periodos de exposición a situaciones de gran estrés emocional.
Según los profesores de Psicología Social David Martínez Íñigo y Antonio Crego Díaz, "los empleados no dejan a un lado sus emociones durante la jornada de trabajo y, de hecho, el componente emocional tiene implicaciones cruciales para su eficacia, motivación, satisfacción, bienestar e incluso salud".
A lo largo de los casi 2 años que lleva en marcha el programa y en sus 3 ediciones, se han atendido a unas 60 personas, entre médicos, personal de enfermería y auxiliares administrativos del área 8 de Atención Primaria del SERMAS de la Comunidad de Madrid con resultados "muy positivos".
Tras observar los resultados del programa, los investigadores han llegado a la conclusión de que los profesionales han reducido sus niveles de agotamiento emocional, han incrementado su sensación de logro en el trabajo y han aumentado sus niveles de satisfacción laboral.
"Los participantes reflejan una mayor sintonía entre las emociones que sienten espontáneamente y las emociones requeridas en el puesto de trabajo. Igualmente aseguran utilizar menos otras estrategias que suponen un mayor nivel de esfuerzo cognitivo y un mayor riesgo para la calidad de la relación con los pacientes como, por ejemplo, enmascarar una emoción negativa bajo una expresión superficial positiva", manifestaron los responsables del programa.
FUNCIONAMIENTO DEL PROGRAMA
El programa comienza con una evaluación específica de los riesgos psicosociales derivados de las demandas emocionales a las que se ven expuestos los diferentes trabajadores. A continuación, se diseña una propuesta formativa de acuerdo a cada contexto de trabajo.
A lo largo de diez sesiones de trabajo, los psicólogos enseñan a los participantes un conjunto de técnicas que favorecen la regulación de emociones propias y de los pacientes. La metodología didáctica de las sesiones se basa en el aprendizaje activo y participativo ('learning by doing') y se complementan con la realización de tareas en las que se promueve la generalización de las habilidades adquiridas al contexto de trabajo.
"El programa supone una importante innovación en la forma de encarar los riesgos asociados a las demandas emocionales presentes en el contexto laboral porque cuando éstas no se gestionan adecuadamente, el profesional se ve sometido a un nivel de esfuerzo y consumo de recursos que pueden derivar en agotamiento y distanciamiento frente al puesto de trabajo, lo que perjudica a la calidad del servicio prestado", explicaron los responsables del programa.
Estos investigadores ya han iniciado las primeras fases para implantarlo en la Fundación Manantial, una institución que trabaja en el ámbito de la rehabilitación psicosocial de enfermos mentales.
Fuente: Qué.es
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